Ese día, después de la partida del guardián, me miré en el agua de la escudilla. Cualquier enfermedad, sea psicológica o física, le conducirá a un viaje de...
La señal para mí de una influencia diabólica es que a los Fourmi los devoraba la pasión de los viajes. Era tan inmenso que resultaba imposible calcular sus dimensiones;...
Pero al mismo tiempo divisé en el extremo de la playa, y muy lejos de nosotros, a dos árabes de albornoz que venían en nuestra dirección. Tengo un mapa muy bueno y un...
Hay palomas y patios oscuros. Y gracias que ya no tiene que terciar Celestina, porque no hubiera podido hacerla decir el corrector ni una sola cláusula a derechas. Las...
Oyó gritar, un grito ronco que rebotaba en las paredes. Este ruido no fue sino el choque sordo del cadáver del lívido y el golpeteo de sus pezuñas al caer rodando...